viernes, 12 de octubre de 2007

¿Que representa para los mexicanos el 12 de Octubre?

Esta es una pregunta que no deseo responder en este momento y por eso invito a los demas participantes a responderla con diferentes elementos, para nosotros, que representa lo que muchas personaas llaman el día de la raza, el encuentro de dos mundo o simplemente el descubrmiento de América, precisamente con ese tema quiero comenzar la discusion y el sano debate en este espacio, tema que mucho mucho tiene que ver con nuestra posición frente a la modernidad y posmodernidad.

7 comentarios:

Xochitl Patricia Campos Lopez y Diego Martín Velázquez Caballero dijo...

Esta fecha representa símbolos distintos según el tipo de mexicanos que se quiera referir. Existen, por ejemplo, los hispanófilos que agradecen la obra civilizatoria impulsada por la España de la Contrarreforma. Para los mexicanos que admiten la importancia del mestizaje y el nativismo, la fecha significa una distorsión. Si bien es cierto que México nace hasta 1821 y que hay una gran deuda con la Europa católica, también debe reconocerse la refundamentación del sincretismo religioso y el sobredimensionamiento del patrimonialismo que implica la herencia española. Es decir, el 12 de octubre significa para el segundo grupo de mexicanos un nudo que muestra la incongruencia de nuestra sociedad, su antimodernidad y condena a subsistir como un grupo marginado de la Historia.
El orden colonial de la Nueva España se ha copiado en la actualidad mexicana. Penínsulares, Criollos y Mestizos Blancos exigen privilegios basándose en su blanquitud y linaje, continúan preguntándose si el mestizo moreno y el indígena tienen alma. No obstante esa blanquitud, no son occidentales y mucho menos modernos. Un amplio sector de indígenas y mestizos, así como toda la pléyade de castas demarcadas por el orden novohispano, viven en el egepticismo y aunque desean vivir; su vitalismo es ingenuo.Pachanga y valemadrismo que se confunde con nihilismo y hasta posmodernidad.
El 12 de octubre es un nudo para México que, sin embargo, debe desatarse. Cueste lo que cueste. Haciendo los ajustes históricos que deban hacerse. Desatarlo será la prueba de nuestra modernización.

M. Valencia dijo...

Sobre el proyecto de modernidad.

A continuación, transcribo el correo que envié el 18 de octubre a el Prof Diego. Es una pequeña contribución al proyecto. Espero comentarios.

En un principio este tema me pareció muy ambiguo; hasta que entendí a la modernidad como un proceso de desarrollo progresivo muy peculiar.

Atendiendo a lo que comentamos la vez que nos reunimos, sugerí utilizar la teoría de las "lineas de ruptura", propuesta por Rokkan y Lipset. Lo que en lo personal me ha sorprendido más, es haber encontrado su utilidad para analizar los fenómenos partidistas en las sociedades occidentales.

Según explica Martínez Sospedra, esta teoría ya ha sido reformada y ha sido difundida por García Cotarelo para el público español. Como te mencioné: no existe traducción al español y, por ende, resalto la importancia de que la conozco desde interpretaciones secundarias.

Básicamente, lo que propone esta teoría es explicar las principales divisiones existentes en las sociedades occidentales derivadas de dos acontecimientos, creo yo, modernos, porque van acompañadas de la acción revolucionaria de la burguesía: el proceso de construcción nacional y la revolución industrial.

El proceso de construcción nacional es importante porque ha redefinido el ordenamiento territorial de las sociedades del "antiguo Régimen", definiendo identidades de pertenencia a un determinado estado-nación, es decir, ha sustituido una sociedad "antigua" por una sociedad "moderna".

Por otra parte, el segundo cambio importante, la revolución industrial, ha transformado de manera importantísima las estructuras económicas, sociales y políticas; sustituyendo a la sociedad "antigua", preeminentemente basada en un estructura económica rural, por una "moderna", basada en la producción industrial y preeminentemente urbana.

El proceso de construcción nacional, al requerir una fidelidad y poner como valor primordial al "interés nacional" crea un conflicto directo con la Iglesia (secularización), la cual, como se expresa en el texto, si es un Iglesia de carácter "nacional" el conflicto puede atenuarse; pero no pasa lo mismo en "el mundo católico" (¿México?) donde el conflicto es persistente.

Ahora bien, si el proceso de construcción nacional es conducido por la burguesía, esto presupone que otras clases se verán subordinadas a su proyecto y serán excluídas y afectadas en sus intereses (poseedores vs. desposeídos) y, se generará, como se señala en el texto, fenómenos de rechazo y periferización (centro vs. periferia) (sociedad rural vs. sociedad urbana).


En líneas generales es lo que propone esta teoría, por ello considero:

1. Explicar el proceso de construcción nacional de nuestro país.
2. Explicar la relación del Estado con la Iglesia (proceso de secuarización).
3. Revisar la estructura federal para verificar si existe una tensión entre el centro y la periferia.
4. Identificar si existe un desarrollo industrial importante en México.
5. Revisar si han existido cambios significativos en la estructura económica, para explicar el conflicto "sociedad rural" vs. "sociedad urbana".

M. Valencia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
M. Valencia dijo...

Con respecto al comentario del 21 de octubre del año pasado, creo las líneas por las cuales se puede empezar, resultan muy generales, ya que si queremos concentrarnos en encontrar rasgos de modernización en el sistema político mexicano, la explicación de las otras líneas de ruptura puede utilizarse como algo complementario.

La teoría de las líneas de ruptura, explica estas fracturas, eminentemente desde una base económica, según me parece. Esto no es nuevo, puesto que desde el texto fundacional de Marx, ya se encuentra ésta explicación, aunque no tan elaborada y debidamente contextualizada.

La teoría es importante porque se considera a Lipset como uno de los teóricos de la “modernización”, estableciendo que el desarrollo económico guardaba relación con la democracia. Aunque si queremos enriquecer nuestra explicación, me parece importante oponer a la teoría de Lipset, la teoría de la dependencia, puesto que es la contestación más directa y desarrolla sus postulados desde un punto de vista regional.

M. Valencia dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
M. Valencia dijo...

Las siguientes son algunas reflexiones hechas a partir de la lectura del libro "La invención de lo político", de Ulrich Beck.


Chernobyl y la caída del muro de Berlín, son para Beck, sucesos con los cuales "se derrumba el ordenamiento o bien-o de lo político (palabras que caracterizan a la primera modernidad, en contraposición a la segunda caracterizada por el y) en este-oeste, derecha e izquierda. (p.10) Es por ello que la nueva invención de lo político cobra relevancia, se hace necesaria.

Para Beck, existen dos épocas de lo moderno: "la simple, industrial, y la reflexiva que se perfila y lleva la invención de lo político". (p.11)

El concepto de "modernización reflexiva" puede contribuir a orientar la investigación acerca de "la segunda modernidad, en la que caímos hace tiempo, -en palabras de Beck-es una modernidad política, precisamente una modernidad que, entre otras cosas, también impulsa la invención de lo político. (p.13)

Beck, observa que en las sociedades occidentales altamente industrializadas, se encuentra ocurriendo un fenómeno de individualización, entendido no en forma tradicional, como se entiende comunmente, sino como un proceso caracterizado por la desintegración y "la sustitución de formas de vida socioindustriales por otras, en las que los individuos deben producir escenificar y remendar ellos mismos sus propias biografías".(p.130)

En una explicación más completa de Beck: "significa la desintegración de las certezas de la sociedad industrial, así como la compulsión a buscar y encontrar nuevas certezas por sí mismo y entre todos" y además, "se encuentra sujeta a condiciones y modelos que enmarcan el Estado social, como el sistema educativo, el mercado de trabajo, el derecho social y laboral, el mercado de viviends, etc.(p.131)

El proceso de desintegración de la modernidad industrial trae consigo "un renacimiento no institucional de lo político: los individuos regresan a la sociedad". (p.134) En este punto, según veo, se deja atrás la concepción institucional de la ciencia política.

El gran problema, según refiere Beck, es la "equiparación de la política con el Estado, de la política con el sistema político" (p.134); cosa que en la actualidad, se está manifestando de manera distinta, ya que "la política pierde su cualidad polarizante".(p.134)

La característica principal de lo político en el proceso de desintegración de la modernidad, es que "la constelación política de la época industrial se está volviendo no política, mientras que lo que era no político en el industrialismo se está volviendo político. (p.136)

A pesar de que Beck refiere que existe una decadencia en la teoría de sistemas, la cual no pone debida acentuación en los individuos, sigue utilizando conceptos proporcionados por esa teoría para explicar la invención de lo político, al hablar de la "política simple", la política oficial, la del sistema político, contraponiéndola a la política reflexiva, a la subpolítica, al "vaciamiento de la política", referida a un subsistema de la política. (p.178)

La nueva invención de lo político es poner más acentuación en lo no institucional, no identificar lo político solamente con lo formal, tal y como ha venido haciendo la ciencia política empírica; en este punto, me parece que lo no institucional es muy importante al igual que lo institucional, por eso han surgido corrientes en la ciencia política como el (neo)institucionalismo con sus diversas orientaciones dentro de las cuales, bien podemos clasificar la propuesta de Beck, como un (neo)institucionalismo de corte sociológico.

Pero dejemos que lo explique el mismo:

"La invención de lo políticosignifica:política creativa, autocreativa, que justamente no cultiva y renueva viejas hostitlidades, ni toma e intensifica los medios de su poder con ellos, sino que propone y forja nuevos contenidos, formas y coaliciones. Con ello se significa un renacimiento de lo político, el que 'se ubica a sí mismo', para usar una imagen de Fichte: que desarrolla y despliega su actividad de la actividad, impulsándose a sí mismo para salir del pantano de la rutina. Esto no significa un 'política de convicciones' (Max Weber) ni una política de palabrerías. Por el contrario, la invención de lo político requiere de un realismo maquiavélico. Pero no se agota en ello, sino que practica y lucha por espacios, formas y foros, estructuras y estilos, dentro y fuera del sistema político." (p 181, 182)

Defensor Populi dijo...

En razón de continuar con la temática de este trabajo que pretende, compartimos los siguientes archivos para su evaluación.
Saludos